Salva al tigre
Ponte en su piel
Aunque sea difícil de creer, al ser humano le ha bastado sólo un siglo para acabar con el 97% de la población tigres salvajes. Y los pocos tigres que viven en libertad están en peligro por el tráfico de especies, la mayor amenaza para la supervivencia del felino más grande del mundo. Pero aún estamos a tiempo de luchar contra esta lacra.
Los tigres salvajes son cazados por furtivos para traficar con su piel, utilizada como alfombras y objetos de decoración; sus huesos, destinados a elaborar medicinas supuestamente milagrosas y con otras partes de su cuerpo como garras y colmillos que se venden como amuletos.
WWF trabaja para acabar con este negocio ilícito que enriquece a muy pocos, pero que nos empobrece a todos porque es un crimen contra la biodiversidad. Únete a la lucha contra este crimen y ayúdanos a salvar a las especies amenazadas.
- En sólo un siglo, hemos provocado la desaparición del 97% de la población de tigres del mundo.
- De las nueve subespecies que existían, tan sólo quedan seis y tres de ellas ya se han extinguido (el tigre balinés, el del Caspio y el de Java).
- En los últimos 15 años se han matado al menos 1.755 tigres, principalmente en Laos, Vietnam y Tailandia .
- Actualmente, hay más tigres en cautividad que en libertad.
- Aún así, nuestros esfuerzos empiezan a dar resultado y la población mundial de tigres salvajes está creciendo por primera vez, aumentando de 3.200 a 3.890 en menos de una década.
- Desde WWF luchamos sin descanso contra el tráfico de especies, apoyando a los guardas que se enfrentan a los furtivos, trabajando con los gobiernos para el endurecer la persecución de este crimen y promoviendo la prohibición del consumo en los mercados de destino, principalmente asiáticos.
Aunque sea difícil de creer, al ser humano le ha bastado sólo un siglo para acabar con el 97% de la población tigres salvajes. Y los pocos tigres que viven en libertad están en peligro por el tráfico de especies, la mayor amenaza para la supervivencia del felino más grande del mundo. Pero aún estamos a tiempo de luchar contra esta lacra.
Los tigres salvajes son cazados por furtivos para traficar con su piel, utilizada como alfombras y objetos de decoración; sus huesos, destinados a elaborar medicinas supuestamente milagrosas y con otras partes de su cuerpo como garras y colmillos que se venden como amuletos.
WWF trabaja para acabar con este negocio ilícito que enriquece a muy pocos, pero que nos empobrece a todos porque es un crimen contra la biodiversidad. Únete a la lucha contra este crimen y ayúdanos a salvar a las especies amenazadas.
- En sólo un siglo, hemos provocado la desaparición del 97% de la población de tigres del mundo.
- De las nueve subespecies que existían, tan sólo quedan seis y tres de ellas ya se han extinguido (el tigre balinés, el del Caspio y el de Java).
- En los últimos 15 años se han matado al menos 1.755 tigres, principalmente en Laos, Vietnam y Tailandia .
- Actualmente, hay más tigres en cautividad que en libertad.
- Aún así, nuestros esfuerzos empiezan a dar resultado y la población mundial de tigres salvajes está creciendo por primera vez, aumentando de 3.200 a 3.890 en menos de una década.
- Desde WWF luchamos sin descanso contra el tráfico de especies, apoyando a los guardas que se enfrentan a los furtivos, trabajando con los gobiernos para el endurecer la persecución de este crimen y promoviendo la prohibición del consumo en los mercados de destino, principalmente asiáticos.
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